Son inversiones de baja volatilidad y un nivel elevado de liquidez que abonan intereses. Se centran en generar ingresos al invertir en diversos activos seguros a corto plazo, como bonos y depósitos bancarios. El objetivo de estos fondos es ganar dinero manteniendo tu inversión estable y fácil de retirar cuando sea necesario. Smart Cash y los fondos del mercado monetario no son una inversión garantizada. El valor de la inversión puede fluctuar y el capital invertido está en riesgo.